Se trata de higos de cultivo biodinámico de origen corintio, semisecados mediante nuestro proceso natural y sin productos químicos.
La higuera es probablemente el tercer árbol más sagrado de la tierra griega después del olivo y la vid. Se considera uno de los elementos más importantes de la dieta de los griegos desde la antigüedad. Según Heródoto, el principal motivo de la campaña de Jerjes en Grecia fue tener acceso a higos frescos.
La higuera es el árbol más importante en la dieta de los griegos desde la antigüedad.
Retienen un mayor porcentaje de humedad que el que suelen tener los higos secos que haya probado en el pasado, manteniendo así más de sus vívidas características naturales.
Su piel es suave y su sabor es exquisito.
Con una piel suave y una pulpa masticable, nuestros higos tienen una textura y un sabor muy ricos. Contienen nutrientes, vitaminas A, B1 y B2, y minerales como calcio, hierro, fósforo, manganeso, sodio y potasio, entre otros.
Los higos que tiene en sus manos son un alimento muy sabroso y sabroso.
Los higos que tiene en sus manos son de origen corintio y biodinámicos. Muchos son de cultivo ecológico "extremo", completamente natural basado en las interacciones dinámicas del entorno más amplio. Se trata de un proceso por el que la Tierra se entiende como un organismo vivo y estimula las fuerzas que actúan sobre la naturaleza. En otras palabras, la percepción y el tratamiento de la naturaleza son holísticos. Cada organismo es parte de un todo, interdependiente e influenciado. Las plantas dependen de la tierra, el agua, el aire (la luz) y el calor, fuerzas que se expresan en la planta.
El higo es una planta viva.
Por ello, estos higos se secan sin ningún proceso químico. Conservan un porcentaje de humedad superior al habitual en el mercado y hacen más vivos su sabor y aroma naturales. Gracias al estilo innovador de nuestra empresa, ahora son semielaborados. La diferencia es que nos encontramos con ellos, concentrando el triple de sabor y aroma. A diferencia del resto que suele cortarse por la mitad y secarse al sol.
Su sabor y aroma es más intenso.
Debido a su cáscara suave, sus semillas crujientes y su sabrosa pulpa, los higos tienen una textura y un sabor muy ricos. Contienen nutrientes, vitaminas A, B1 y B2, y minerales como calcio, hierro, fósforo, manganeso, sodio y potasio, entre otros. Al mismo tiempo, tienen un papel auxiliar en el control del peso. La razón es que ralentizan la digestión y retrasan la eliminación de los alimentos de nuestro estómago, manteniendo la sensación de saciedad durante más tiempo. Esto nos lleva a no tener hambre pronto y a no picar cada media hora lo que encontramos en la nevera. Son ricos en azúcares y proteínas, razón por la que escaladores, excursionistas, alpinistas, etc. siempre llevan consigo higos secos, ya que su consumo aporta energía de inmediato a su sufrido cuerpo.
Al mismo tiempo, son conocidos por prevenir el estreñimiento. Por su acción como laxantes suaves, los higos pueden dar la solución a las personas que sufren el problema del estreñimiento y quieren probar un método natural de ayuda. El consumo diario de tres higos ayuda a aliviar el problema. Si te preguntas si elegirlos frescos o secos, los expertos señalan que tienen el mismo efecto.